LAS PRáCTICAS SENCILLAS Y ENTRETENIDAS PARA TENER UNA MEMORIA PRIVILEGIADA

Te empeñas o bien piensas mucho en mejor tu forma física y tu salud, pero ¿y la mental? La memoria es uno de los pilares, eso que además solemos ir perdiendo con los años, la típica frase de "dónde dejé las llaves" o "cómo se llamaba el actor de...". La memoria, como el cuerpo, hay que ejercitarla a diario, así que toma nota de prácticas sencillas y entretenidas para una memoria privilegiada.

No solo lograrás mejorar tu memoria y capacidad, sino que evolucionarás como persona y en tu salud mental, al ir todo conectado. No hace falta que hagas nada complejo, simplemente entrenar tu cerebro con pequeños retos, planes y sencillas rutinas que igual antes tenías por sagradas y has olvidado, como leer un poco cada día. 

Simples rutinas para una memoria sana

Para empezar, verá como para tener buena memoria no se requieren grandes sacrificios, aunque luego para mejorarla sí que hay que ejercitarla. Lo primero es evitar la rutina siempre que puedas. No hay que cambiar de vida, simplemente no seas un autómata que cada día hace lo mismo en el mismo orden. El cerebro va perdiendo estímulos y cerrando conexiones. 

Intenta cada día hacer algo diferente según el tiempo que te sobre: caminar un poco, hacer yoga o meditar en casa, empezar algún hobby... También proyecta tu mente en el aquí y ahora, sin pensamientos obsesivos o negativos, socializando lo más posible con amigos y familiares y con el humor como eje. Ríe mucho y tu memoria mejorará, ya verás. 

Practica simples y muy eficientes

La primera es volver a siglo XX. No te asustes, no hay que volver a la vida pasada, sino a rutinas que hemos ido olvidando, como escribir a mano. Deja un poco el móvil y la tablet y escribe a mano tus ideas, la cesta de la compra, tus apuntes... Usa una agenda como las de antes. Un pequeño gran cambio para tu cerebro. Escribiendo a mano retenemos mucho más que tecleando. 

Y la típica pero no por ello menos eficaz. De hecho, es imprescindible si quieres tener una memoria privilegiada: practica matemáticas simples con sudokus o dilemas aritméticos. Verá como engancha tanto como un videojuego y tu memoria y capacidad se expandirán mucho más. Arma rompecabezas, resuelve acertijos, juega al ajedrez... Busca lo que más te guste pero ejercita tu mente.

Te lo pongo más fácil

Si eso es mucho para ti, te aburre o quieres empezar por algo más relajante y que sea muy eficaz para tu cerebro, simplemente lee. También hay estudios que evidencian que solo con la lectura aumentas tu conectividad cerebral. 

Con la llegada de los móviles, tablets y ordenadores, hemos ido perdiendo el gusto y la rutina de leer, e incluimos lo leído en webs como misión cumplida. Prueba a leer un libro que antes devorabas en pocos días y verás como ahora te cuesta estar media hora leyendo enfrascado en el texto. Es tu cerebro que se ha acostumbrado a lo malo. Vuelve a la lectura de siempre y relajada. 

Memoria privilegiada en español en lo que sea

Sí, otro de tus retos nunca abordados o terminados. No se trata ahora de dominar un idioma, llegar a una meta concreta. Igual no lo necesitas ya para nada ni lograrás dominarlo, pero tu cerebro será otro si te pones a aprender otro idioma en serio, a memorizar vocabulario, aprende gramática, relacionar conceptos... Es el entrenamiento ideal para tu cerebro.

Si los niños aprende tan fácil un idioma es la plasticidad de su cerebro y las conexiones que se multiplican exponencialmente, como pasa con la música. Ya no tendrás ese cerebro, pero sí recuperarás algo de esa plasticidad y conexiones. Los bilingües tienen mejores conexiones, son más hábiles visualmente y más creativos. Todo esto se aplica a aprender un instrumento musical. 

Desarrolla nuevas habilidades o retos

Si algo le viene bien a tu cerebro y memoria es emprender un nuevo reto, tener un objetivo, sin que sea obsesivo, claro. No se trata de montar una empresa o un plan ambicioso. Basta con comenzar un hobby, aprender a bailar, convertirte en un coleccionista de lo que sea, cualquier nueva habilidad en artes, deporte, disciplinas... 

Este estudio publicado en la revista Psychological Science así lo corrobora. Lo mejor es algo a largo plazo, así que busca algo que siempre has querido hacer o aprender, que has querido dominar. Será un aprendizaje continuo que supondrá el mejor estímulo para tu cerebro, expandiendo tu memoria. 

Y no olvides...

Tienes que ejercitar la memoria, pero es vital tener unas premisas y pilares para sostener todo:

La alimentación sana y variada: sobre todo para que a tu cerebro no le falte de nada. Para ello en tu dieta debe de incluir las vitaminas B, los antioxidantes, los ácidos grasos omega-3 y los minerales son importantes para el cerebro; nutrientes como el ácido fólico, la vitamina B6 y la vitamina B1, asociados a una adecuada función cognitiva. 

El ejercicio beneficia directamente al cerebro, como lo demuestran investigaciones como esta: más flujo sanguíneo cerebral, plasticidad cerebral, reducción del estrés y la inflamación, regulación de neurotransmisores y mejora de la función cognitiva. 

El descanso es otro pilar fundamental. Un cerebro que no descansa lo suficiente irá a peor. Necesita un sueño adecuado y suficiente para eliminar deshechos, regenerarse y restaurarse, y regular el estrés. Recuerda que el cerebro está tanto o más activo mientras duermes. 

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