MI ABUELO PUEDE HACER 500 FLEXIONES DE BRAZOS MIENTRAS QUE MI ABUELA CAMINA DOS HORAS DIARIAS: SON MI INSPIRACIóN PARA MANTENERME EN FORMA
Este artículo se basa en una conversación con Phil Mackenzie, un influencer de fitness de 37 años residente en Ontario (Canadá). Se ha editado para que sea más breve y claro.
Mi nana y mi abuelo pueden hacer cualquier cosa. Son los que más se mueven de todas las personas que he conocido. Mi abuelo hace 500 flexiones tres veces por semana y mi abuela camina dos horas todos los días. Puedo ver cuánto mejor es su vida a los 84 y 80 años en comparación con otras personas que apenas pueden levantarse de una silla a los 70.
El fitness siempre ha estado en mi vida y creo que mis abuelos son el origen de todo. Me han inspirado y siempre priorizo
el deseo de estar fuerte y en forma, levantar pesas y hacer cardio gracias a ellos dos.
Mi abuelo lleva seis décadas levantando pesas
Mi abuelo empezó a levantar pesas mucho antes de que se pusiera de moda. Hay fotos de él en un gimnasio cuando tenía 18 años y ahora tiene 84. Todavía levanta pesas cinco veces a la semana, usa la elíptica tres veces por semana y camina con mi abuela dos horas al día.
Y durante toda su vida, siempre ha hecho trabajo físico. Él y mi nana renovaron las casas en las que he vivido, y él ayudó a construir el hogar en el que mi familia y yo vivimos hoy. Incluso corrió una maratón con sus botas de trabajo cuando era más joven, solo para ver si era capaz.
Empecé a jugar al rugby a los 13 años y a levantar pesas a los 14, lo que me encantaba por mi abuelo. Lo vi levantar pesas y cómo eso lo llevó a tener confianza y fuerza. Así que creo que sentí un profundo amor por ello desde el momento en que me inicié, solo por haberlo visto hacerlo durante tanto tiempo.
Aunque me gustaría entrenar con tanta frecuencia como mi abuelo, mi esposa y yo tenemos cuatro hijos menores de siete años, así que mis entrenamientos son breves y suaves. Antes era jugador de rugby profesional, pero me retiré a los 30 años. He entrenado en casa durante los últimos cinco años.
Por lo general, hago entrenamientos de 30 a 35 minutos, cuatro o cinco veces por semana. Básicamente consiste en entrenamiento con pesas y un poco de cardio, como entrenamiento de velocidad con intervalos altos. Además de eso, mi esposa y yo vamos caminamos con nuestros hijos al colegio y jugamos al tenis cuando podemos.
Quiero inspirar a mis hijos a adoptar hábitos saludables, tal como me inspiraron mis abuelos
Me mantengo en forma porque quiero poder hacer cualquier cosa por mis hijos. Me resulta muy difícil imaginar no poder hacer algo físico, especialmente como padre.
Además, quiero que mis hijos se sientan inspirados de la misma manera que mi abuelos me inspiraron a mí. Realmente creo que las acciones hablan más que las palabras. Obviamente, todos los padres dicen que quieren que sus hijos sean personas saludables, pero creo que muy pocos están dispuestos a demostrárselo.
Nunca quiero presionar a mis hijos para que practiquen deportes o hagan ejercicio, pero me ven haciéndolo todo el tiempo, y los niños realmente captan todo.
He adquirido hábitos saludables de mis abuelos
Creo que por eso tengo tanta pasión y compromiso con el fitness. Ya sea que lo supieran o no, las acciones de mis abuelos han dado lugar a todos estos hábitos saludables que he adquirido.
Por ejemplo, todavía no voy andando a hacer la compra, pero aparco lo más lejos posible de la puerta del supermercado para que tengamos que caminar más para entrar. Estoy seguro de que es un pequeño hábito subconsciente que heredé de mi abuela.
También cocina en casa: mi nana hace todo casero. Y en todos estos años, nunca recuerdo haberla visto comer un plato enorme o una segunda ración. Como mi abuelo. Solo comen lo que necesitan.
Intento comer de forma muy similar a como ellos lo hacen. Mi esposa y yo tratamos de limitar los alimentos procesados
tanto como sea posible y comemos muchas proteínas, fibra y verduras.
Si quieres estar estar en buena condición física cuando seas mayor,debes hacer estas pequeñas cosas ahora. La gente suele considerar la actividad física como algo de todo o nada, pero creo que puedes ir aprendiendo poco a poco.
Tal vez caminar hasta el supermercado sea demasiado difícil ahora, pero puedes empezar aparcando al final del aparcamiento como yo lo hago, y poco a poco ir alejándote más.
Muchos de los hábitos saludables de mis abuelos son gratuitos, como caminar, eliminar los alimentos procesados, no beber mucho y dormir lo suficiente. Pero en realidad se trata de crear hábitos para toda la vida.
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